¡Hola a todos! ¡Cristo ha Resucitado! Me llamo Ángeles y quiero compartir con todos vosotros como experimenté el día de mi compromiso en Koinonía Juan Bautista. Cuando los hermanos me preguntaron si quiero hacer el comprometerme de caminar con ellos para tres años, lo tenía seguro, pues el Señor ya lo había puesto en mi corazón. Para mí es muy importante caminar con todos ellos, pues cuando estamos juntos a parte de sentirme como en casa, siento fuertemente la presencia de nuestro Señor Jesús entre nosotros, veo como se manifiesta y como hay alegría durante todo el encuentro. Parece que uno está de fiesta siempre. Para mí también supuso una gran alegría que mi esposo y una de mis hijas estuvieran conmigo. Este compromiso, no es una carga sino un regalo, es un caminar juntos, llevando la presencia de Dios entre nosotros. Espero que el Espíritu Santo me de el don de poder transmitir su presencia activa a los demás y transmitir también su Palabra, porqué sólo en ella se encuentra la verdadera felicidad. Hay felicidad en toda la comunidad, su acogida siempre es cariñosa y de corazón. Estar con ellos es como decía Pedro a Jesús en la transfiguración: qué bien se está aquí. Les doy gracias de todo corazón.
Ángeles