Este primer fin de semana de abril hemos tenido un retiro en Villardeciervos, y me gustaría deciros cómo viví yo este curso y cómo aproveché esta experiencia.
He experimentado el poder salvador💪 de Dios que me ama con amor infinito, sé que soy pecadora pero al poner mis problemas de esta vida en sus manos, al clavar mis pecados en su cruz Él me libera de ellos, los sufre por mí, sana y lava mis heridas e inmediatamente ya se manifiesta y me hace sentir feliz, transforma mi oscuridad en luz.
Sé que soy hija de Dios 💁♀️ , que Él me ha salvado, que nunca me va a abandonar, que quiere lo mejor para mí. Confío en Él tanto de palabra, como también, con la ayuda del Espíritu Santo, en hechos, que quiero subirme a su carretilla cuando me transporte por la cuerda floja no ausente de peligros.
He experimentado su amor, siempre me restituye mi dignidad como su hija. Aunque a veces, no entiendo cosas que suceden en mi vida, yo sé que como la he puesto en sus manos🤲, nunca serán para mal. Cuando Él lo cree necesario, me restaura, me abraza y apacigua mi corazón.
He aprendido también que la desconfianza viene del pecado, así que no pienso volver a desconfiar de nada de lo que digan mis hermanos, hijos suyos y a los que a veces utiliza para enviarme su mensaje.
Durante el curso he vuelto a sentir la efusión del Espíritu Santo 🔥, que me renueva por dentro, que me desborda igual que a un vaso abierto y crea en mi un deseo de ser mejor, me devuelve la alegría y la confianza, me llena de deseo de ser utilizada por Él y me insta a llevar el mensaje de Jesús a los demás para que también lo experimenten en sus vidas y de esta forma que se sientan alegres a pesar de todas circunstancias, descargando sus problemas en Él.
Respecto a esta experiencia en comunidad siempre siento que el Señor está con nosotros, cuando estamos todos reunidos teniéndolo a Él como centro, siempre se experimenta alegría. Ángeles
“En primer lugar quiero agradecer a los hermanos de la Koinonía Juan Bautista por haber impartido este retiro. Desde mi punto de vista estuvo muy bien organizado y lleno de detalles. Ha sido un curso dinámico, en el cual participamos todos los presentes en un ambiente familiar y cercano.
De manera personal quiero compartir que he vivido esta experiencia sintiendo paz, liberación y mucha alegría. ¿Y por qué? Porque he sentido la presencia viva de Jesús entre nosotros, porque una vez más se hace pequeño para llegar a nuestros corazones ♥️, porque nos ama tal y como somos y porque con Su amor puede llegar a lo más profundo de nuestro ser para sanar y para liberar.
Uno de los temas de los que se ha hablado fue : el pecado.
Me ha tocado profundamente ya que he recordado lo pequeños, lo necesitados y pobres que somos si no ponemos nuestra mirada en Él que salva, en Él que ama y perdona.
Con una última reflexión me despido: somos amados por el Señor, tú y yo, tal y como somos, pon tu mirada en Él, camina con Él y ya verás como el día a día cobra sentido, porque te moverá Su amor y actuarás desde Él, porque actúa a través de todo aquel que abre su corazón 💓 . Ana